martes, 25 de agosto de 2009

Personas que clasifican desechos sólidos, aprenden una nueva posibilidad de trabajo







Mediante una serie de talleres impartidos en las instalaciones de la Autoridad para el Manejo Sustentable de la Cuenca del Lago de Amatitlán, un grupo de clasificadores de basura que laboran normalmente en el interior del relleno sanitario de tecnología apropiada, ubicado en el km. 22 de la ruta al pacífico, aprenden una nueva manera de poder agenciarse de recursos a través de elaboración de manualidades a base de desechos, mismos que son obtenidos de la basura y que muchos de ellos no son re-comercializados.
Uno de los propósitos según explica Mariluz Pineda, epesista de la Universidad de San Carlos, encargada de impartir los talleres, es que los clasificadores cuenten con nuevas maneras de agenciarse de ingresos que les permitan mejorar su calidad de vida. "Los talleres los estamos impartiendo los viernes en la tarde y esperamos que en el futuro, los clasificadores no tengan necesidad de trabajar de la recolección, sino dedicarse a la elaboración de manualidades reciclables" finalizó Pineda.
Algunos de los productos que los clasificadores podrían elaborar y comercializar son: Costales para transportar productos en sustitución de la bolsa plástica, recipientes de comida para animales, elaborados a base de llantas reusadas; lámparas hechas a base de envases PET (Polietileno Tereftalato) además de otros accesorios, como saleros, azucareras, servilleteros entre otros.
De esta manera AMSA, fomenta a través de la División de Desechos Sólidos y de Educación Ambiental, el aprovechamiento de los residuos conocidos como basura. 




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